América, el equipo que divide a México

El equipo fundado el 12 de octubre de 1916 por un adolescente de 14 años conocido con el mote de Récord lleva el nombre del continente. América divide a México por completo. La mitad lo ama fielmente, la otra mitad lo odia a muerte. Tanta historia está segmentada en épocas. Cada época representa un capítulo particular de su rica historia. En sus vitrinas se guardan 10 títulos de liga y los románticos se encuentran en pie de guerra exigiendo el reconocimiento de lo alcanzado en tiempos lejanos.

América fue un trabuco en los albores del futbol mexicano. En la década de 1920 conquistó un tetracampeonato en la liga amateur. Y sus gloriosos futbolistas formaron, en su mayoría, la primera selección mexicana que representó al país al jugar contra nuestros vecinos guatemaltecos.

El América, antes de ser señalado como un equipo de millonetas, también fue pobre y vivió momentos de incertidumbre. Sus colores crema y azul, cuyo origen tiene varias interpretaciones, se fueron haciendo costumbre en nuestro futbol.

De la mano de la televisión fortaleció su identidad y comenzó una rivalidad con el Guadalajara que dio origen al Clásico Nacional.

Aquellos cremas se volvieron águilas y para ser águila se necesita tener la capacidad de soportar las exigencias máximas sin poner ningún pretexto de por medio. En América los futbolistas se consagran o se hunden en la miseria del olvido. Sus cuadros siempre han sido una mezcla de jugadores extranjeros, que asumen el reto impuesto, con una base de mexicanos que estén dispuestos a entregarse al americanismo.

El sello de inolvidable se le ha otorgado a hombres como Carlos Reinoso, Enrique Borja, Alfredo Tena, Cristóbal Ortega, Héctor Miguel Zelada, Antonio Carlos Santos, Cuauhtémoc Blanco, Francois Omam Biyik y Salvador Cabañas.

En las fuerzas básicas del club América, además de perfeccionar el talento de sus jóvenes, se enseña a enfrentar la rivalidad más encarnizada de todo el futbol mexicano porque no hay equipo que no le juegue a muerte, porque todos le quieren ganar.

No hay comentarios: